Para el presidente del Observatorio Legislativo de Quintana Roo, Eduardo Galaviz Ibarra, es muy sospechoso (de manera electoral) el rapto del que fue víctima el presidente del Tribunal Electoral de Quintana Roo, Sergio Avilés.
“¿Por qué al magistrado presidente? ¿Cuál era la finalidad? Entra la sospecha de que sea un intento de dejar un mensaje de que necesitamos que estés atento a nuestras indicaciones o que tengas decisiones que no afecten a tal grupo, en fin”.
Es delicado, por tratarse de una persona con una posición importante dentro de la estructura política/electoral quintanarroense, y mucho más, porque ocurre previo a las contiendas electorales, precisó.
“Nos da mucha sospecha, y será muy importante que se esclarezca por qué se fueron contra él; porque fue un ‘levantón’ que llevaba sus fines. Se necesita saber con claridad las motivaciones que dieron lugar al evento”.
Agregó que dicho hecho violento registrado en la noche del lunes es un indicativo del grave clima de inseguridad que se vive en la entidad.
Además, reprobó que funcionarios públicos, regidores, legisladores y gobernantes se dediquen de lleno a dar rienda suelta a sus alegres campañas proselitistas anticipadas, olvidándose por completo de la ciudadanía y su seguridad.
“Todas sus acciones conllevan un objetivo electoral; es muy reprobable que todo se esté haciendo en función de las campañas, porque están dejando de lado la gobernabilidad del estado y de los municipios. ¡No es admisible que se estén dejando de lado todos los temas importantes!”.
Información de Noticaribe Peninsular
