El INE definirá los criterios de paridad de género que tendrán un impacto significativo en Quintana Roo, donde habrá elecciones de diputados y presidentes municipales en 2024.
Este viernes, el consejo general del Instituto Nacional Electoral (INE) definirá los criterios para que los partidos políticos designen a sus candidatos a gobernador en las nueve entidades donde se renovarán los ejecutivos estatales el próximo año. Entre los criterios que se evaluarán, el de paridad de género tendrá un impacto significativo en Quintana Roo, donde también habrá elecciones de diputados y presidentes municipales, junto con la presidencial en 2024.
La comisión de prerrogativas del INE ya ha presentado una propuesta que ha causado revuelo en los partidos políticos. Esta propuesta plantea, incluso, la posibilidad de establecer la obligación de postular candidatas en estados gobernados actualmente por hombres.
Esto implicaría que, en el caso de Quintana Roo, la autoridad electoral establezca también en qué municipios deben ser hombres o mujeres quienes sean postulados a las presidencias municipales.
Hasta ahora, se ha propuesto que al menos cinco de nueve estados postulen a mujeres, lo que significaría también que al menos en seis de los 11 municipios quintanarroenses sean postuladas candidatas.
Esta idea, aunque no es novedosa y ya se ha aceptado en el pasado, ha causado controversia al plantear que en los estados gobernados por hombres, se postulen mujeres como candidatas.
En consecuencia, en Quintana Roo, donde siete municipios están bajo administración femenina, en cinco de ellos se deberían postular a candidatos hombres.
Estos municipios son Isla Mujeres, Benito Juárez, Puerto Morelos, Solidaridad, Cozumel, Felipe Carrillo Puerto y Othón P. Blanco.
Asimismo, hay otros criterios que se tendrán que tomar en cuenta, como la competitividad real de las candidatas en sus distritos o municipios, cuotas para jóvenes e indígenas.
Pero además, las actuales alcaldesas tienen el derecho constitucional de poder reelegirse y tampoco se les puede anular esa posibilidad con un criterio cuestionado en su base legal.
El mayor desafío es que el INE pretende imponer criterios de postulación a los partidos políticos, lo que atenta contra su autonomía y su toma de decisiones internas.
Es probable que, si se impone este criterio, los partidos recurran al tribunal electoral.
Si bien la paridad de género es una conquista importante para las mujeres en la política, no debe resolverse mediante imposiciones que sacrifiquen la experiencia y capacidad de las personas candidatas, porque quienes paguen los platos rotos será la población en general.
Un país, estado, un municipio y hasta un distrito electoral necesita líderes con la capacidad de abordar sus problemas de manera efectiva, independientemente de su género.
La equidad de género debe promoverse, pero sin socavar la calidad de la representación.
El INE debe recordar sus límites y garantizar que los partidos cumplan con la paridad de género, pero sin forzar la designación de candidatas y candidatos en determinados estados, municipios y distritos.
Con información de Palco Quintanarroense